Pues los poetas son
pequeños animales en disturbio
con la sed en los ojos y en la
garganta amor


(Jesús Hilario Tundidor)

viernes, 12 de septiembre de 2014

Friolento

(Viñeta de El caso Maiakovski, de Laura Pérez Vernetti)


Quiero Rusia entre las tetas de Megan Boyle,
pellizquear el centro de Leningrado
y engañar como a un chino a su novio.
Porque ahora zares americanos
hacen la revolución de espejos invertidos,
morirá la epopeya en el confín de la llama.

Mirad esta noche las luces del desfile,
allí aprendieron a bailar
los que supieron del amor
en el cadalso caralsol.
Todo lo pálido está dejando su rostro,
todo el frío lento
esconde su mano izquierda en mi bragueta
y pone un manso mohín.
 
Y nadie sabe si, 
danza o batalla,
escribir algo profundo
significa decir subsuelo. 

1 comentario:

José Luis Martínez Clares dijo...

Morirá la epopeya en el confín de la llama... magistral. Un abrazo