Pues los poetas son
pequeños animales en disturbio
con la sed en los ojos y en la
garganta amor


(Jesús Hilario Tundidor)

miércoles, 15 de agosto de 2012

La Última Noche Blanca




yo
soy el único heraldo de la verdad futura

(V. Maiakovski)




Te acercaste como un ángel de la guarda,
alas de luna desnuda en cuarto creciente.
Con un eco que cruzaba el crepúsculo
tus palabras eran noches blancas de Leningrado:
"Mañana no moriremos".
Pero ahora el mañana ya no importa,
a donde voy siempre es todavía.
Sólo tú ocuparás el palanquín
que ellos construirán sobre mi cadaver
y lo harás trono del oro más brillante.

Más allá de Vanka y el Soviet,
de la Ilíada sangrienta de las revoluciones,
no será el juramento rojo
lo último que pronuncien mis labios de abril.
Nunca habrá nación capaz de contener a un poeta,
porque somos el único heraldo de la verdad futura
y de la impostura del pasado.
El presente quizás un gatillo estrecho para nuestros dedos.

Porque detrás de tí,
al final de mí,
sólo queda esa palabra.
Lilí,
todos los poetas mueren por amor.

2 comentarios:

José Luis Martínez Clares dijo...

No hay nación capaz de contener a un poeta, es una verdad tremenda. Menudo verso!!!!

María José Collado dijo...

Somos tántos animales en disturbio
que respiran con su huella en la tinta. Un placer leerte.

Un saludo