Pues los poetas son
pequeños animales en disturbio
con la sed en los ojos y en la
garganta amor


(Jesús Hilario Tundidor)

martes, 27 de diciembre de 2011

Post - Bobismo

¡A las barricadas!, Nel Amaro



En lenguaje romántico, burgués significa el hombre que no tiene otro culto que el de la moneda de cinco francos, otro ideal que la conservación de su pellejo, y a quien, en poesía, le gusta la romanza sentimental y, en las artes plásticas, la litografía.


Theodore de Banville

viernes, 23 de diciembre de 2011

Feliz Verdad


Primavera (Amor)

Verano (Libertad)

Otoño (Belleza)

Invierno (Verdad)

Orgullo Y Satisfacción

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Crisis


El BCE presta 489.000 millones de euros a los bancos en la primera subasta a tres años

http://www.rtve.es/noticias/20111221/bce-presta-489000-millones-euros-bancos-tres-anos-primera-vez/483839.shtml



No volváis a pronunciar esa palabra, no, no os atreváis, porque nadie se la cree si sale de vosotros con ese empático énfasis. Fue el pretexto perfecto para justificar la utilidad de la política actual durante tres largos años, pero ya hemos tragado demasiado humo de confeti.

martes, 20 de diciembre de 2011

Partido Del NacionalDesprecio



"Como necios seguimos esperando un nazismo de cruz gamada y prepucio incorrupto del caudillo, sin darnos cuenta de que el nazismo está ya aquí: arropado de estadística, microchips, desprecio por el ser humano ­­­-el fascismo es el desprecio, nos previno Albert Camus- y devastación de la naturaleza. Y la catástrofe, esta vez, parece definitiva".

Jorge Riechmann

lunes, 19 de diciembre de 2011

El Secreto De Sinde


Gloriosa portada del número 6 del pasquín Discóbolo

jueves, 15 de diciembre de 2011

La Fuerza De Las Palabras

En efecto, en muchas ocasiones, el poeta dice algo literalmente insensato que nuestra razón interpreta a su modo; esto es, de una manera que le es congruente. Pero ello no impide que la insensatez siga actuando en calidad de tal, aunque privada del disentimiento que la actividad intelectiva dispara automáticamente contra lo incomprensible… la interpretación racional sirve, en estos casos, no sólo para darnos un sentido comprensible, sino también, y sobre todo, para anestesiar y suspender el disentimiento, y permitir que lo dicho obre desde su literalidad con el efecto que en nosotros correspondería… Ahora bien, la frase ilógica continúa en nosotros leal a susentido literal, que recibimos también, pero apaciblemente y con asentimiento, en combinación armónica con el otro sentido sensato… ¿A qué se debe este fenómeno de duplicidad significativa? Evidentemente a algo que con frase vulgar denominaríamos «la fuerza de las palabras». Las palabras a veces no pueden separarse por completo de lo que literalmente afirman…

Carlos Bousoño

martes, 13 de diciembre de 2011

PRIMER CERTAMEN DE POESÍA "PEQUEÑO ANIMAL EN DISTURBIO"

BASES

1. Podrán concurrir a este Certamen todas las ex-amantes del Organizador residentes en España o en el extranjero con originales inéditos en su conjunto, que no hayan sido premiados ni total ni parcialmente con anterioridad o estén pendientes de veredicto en otros certámenes.

2. La temática de los trabajos girará en torno a la figura central del Organizador del Certamen.

3. No se establece un mínimo de versos ni un máximo (pueden ser un poema o conjunto de poemas). Los trabajos deben enviarse en archivo Word tamaño DIN-A4 en letra Times New Roman tipo 12 mecanografiados a doble espacio.

4. Se valorará positivamente que los trabajos tengan una razonable subjetividad y parcialidad.

5. Los originales irán firmados y se presentarán por triplicado con un título o lema y acompañados de un sobre rojo firmado con el titulo o lema de la obra presentada.

6. Se enviarán las obras por email, para ello se adjuntarán dos documentos Word, en uno con el título o lema de la obra irán los datos de la autora y en otro el lema o la obra que presenta, todo esto remitido a: info@animalendisturbio.org

7. El plazo de admisión de originales finaliza el día 30 de febrero de 2012.

8. El Organizador del concurso seleccionará de entre los originales recibidos aquel que, a su juicio, reúna el mayor mérito literario, teniendo facultad de declarar desierta la concesión del premio. El fallo será inapelable.

9. Se establece un único premio de un ramo de rosas sujeto a retenciones fiscales.

10. Los trabajos no premiados se destruirán una vez realizado el fallo, y después de la entrega del premio el Organizador no mantendrá contacto (de ningún tipo) con la ganadora.

11. La presentación al Certamen de Poesía "Pequeño Animal En Disturbio" implica la total aceptación de sus bases, cuya interpretación, incluso la facultad de declararlo desierto, queda a libre juicio del Organizador. Todas las incidencias no previstas en ellas serán resueltas desde el momento de su constitución.

viernes, 9 de diciembre de 2011

Los Más Felices En Conserva

La mañana está acabándose, los bares de Santa Cruz empiezan a llenarse de turistas devoradores de tapas y paisanos sin mejor cosa que hacer que contemplar cómo se va cada minuto. Ahora sí, Mateos Gago arriba, soñemos que la librería Renacimiento sigue abierta en su antigua ubicación, antes de desplazarse a tres naves sitas en Valencina de la Concepción, donde se desplegó como el millón de libros que Abelardo Linares compró en Nueva York cuando murió el legendario librero Eliseo Torres (yo estuve en ese edificio del Bronx donde Linares pasó un año y de donde se trajo no sólo un millón de volúmenes, sino también unos cuantos poemas morandianos y potentísimos). Abelardo Linares empezó como buscador de libros, puso un puesto en El rastro madrileño con los ejemplares que tenía repetidos, luego volvió a su Sevilla natal, en la tienda de sus padres le cedieron un rincón, luego abrió una librería pequeña, empezó a acumular libros, se instaló por fin en Mateos Gago. Es el culpable de que un ejército de poetas menores subieran de precio: su catálogo número 100 es una obra maestra (de hecho, cuando un periódico me pidió hace años que eligiera mi libro favorito, no dudé en elegir el catálogo número 100 de la librería Renacimiento). También, desde finales de los setenta, es uno de los editores esenciales de la poesía española. Publicó libros indispensables como Juegos para aplazar la muerte de Juan Luis Panero, Paraíso Manuscrito de Felipe Benítez, La destrucción o el humor de Javier Salvago, Jarvis de Lorenzo Martín del Burgo, Europa de Julio Mártínez Mesanza o La caja de plata de Luis Alberto de Cuenca. Quienes empezábamos a escribir poemas a finales de los ochenta, soñábamos con publicar un libro en la editorial Renacimiento. Y ya que hablamos de soñar, por qué no, soñemos que podemos abrir la puerta de entonces, un poco pesada y chirriante, y que enseguida nos golpea el olor a libro viejo, la sala sin nadie que es la primera que uno se encuentra al entrar, llena de libros imponentes, e inmediatamente la sala donde se trabaja: alguien hace paquetes, alguien atiende al teléfono, el librero marca libros, suena jazz, cómo no. Circunspecto y poco efusivo el librero nos saluda. Pregunta qué tal nos va, o saca de las estanterías del fondo, altísimas, donde están los libros que él edita, las últimas novedades y nos las regala. Supongamos que llega entonces Vicente Tortajada, que empieza a contar chistes o chismes. Que está por allí el poeta Rafael Adolfo Téllez con sus cuitas amorosas, con sus poemas propios, emocionantes y cálidos, que nos recita de memoria antes de preguntar ansioso: ¿qué te parece? (...) Supongamos en fin que tenemos veinticuatro o veinticinco años, que todo está por descubrir y no hay prisa en ir descubriéndolo, que nos quedamos inmediatamente con los nombres propios que salen de la boca del librero Abelardo Linares, el editor que quiere publicar todo lo que ha ido descubriendo a solas, que va dando pistas constantes sobre nombres esquinados de nuestra poesía, modernistas menores pero con encanto intacto, vanguardistas ilusos, raros poetas latinoamericanos que están aguardando pacientemente la llegada de un biógrafo que los eleve a la categoría de grandes personajes. Escuchamos sin cansancio al librero, al editor, al amigo, cuya generosidad le permite prestarnos libros que nuestros bolsillos no podrían adquirir nunca y nuestra suerte nunca hubiera encontrado sin su ayuda. Eso es, supongamos que tenemos veinticuatro o veinticinco años, que acabamos de cobrar nuestro sueldo de redactor de una emisora de radio, que tenemos toda la mañana por delante y una decena de librerías aguardándonos, con las conversaciones vivas de los libreros amigos y las conversaciones difuntas de los poetas. Vamos allá. La mañana, semejante a nuestra curiosidad y nuestra enfermedad del libro, no tiene fin.

Juan Bonilla, Paseo por las librerías de viejo de Sevilla (extracto).


Desde aquí demando un stand propio de poesía para la próxima Feria del Libro Antiguo. Porque si no no volveré a escribirla con mayúsculas. He dicho.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Idiotas que Sólo Buscan Nombre (II)


"Cada escritor tiene sus propias exigencias espirituales y una de las

mías es encontrar el título adecuado para mis libros." (Ciro Alegría)



Algunos títulos que merecen un plagio con cariño:

-Yo era un tonto y lo que he visto me ha hecho dos tontos, Rafael Alberti.
-Hombre lascivo y sin linaje, Ijara Saikaku.
-Más X que un sex-shop, Jorge Martín.
-Un Coney Island de la mente, Lawrence Ferlinghetti.
-De una niña de provincias que se vino a vivir en un Chagall, Blanca Andreu.
-Tanka a trancas y a barrancas, José M. Prieto.
-Importará el trueno, Eliseo Alberto.

martes, 6 de diciembre de 2011

Idiotas que Sólo Buscan Nombre

Titular dos años de tu vida desangrados sobre poco más de 50 páginas se me antoja absurdo. Cuatro palabras para definir otras miles en un acto de pura condescendencia, el mayor de todos,
que hay que llevar a cabo. Sin embargo, en los talleres de escritura creativa no enseñan cómo ponerle nombre a una lágrima o traducir la ceniza al castellano. Me gustaría dejar que el lector diera este paso, tuviera la última palabra, una página al final de libro donde cada cual si así lo desea escribiese un título. Porque yo no puedo, han sido demasiadas las fuerzas extrañas con las que he tenido que negociar para poder cerrar aquel moleskine negro, y estoy cansado.
Y todo por conseguir un ISBN. Qué se le va a hacer.